Carta Brasil Assembléia Mundial dos Habitantes - Comitê Brasil

En Río de Janeiro, en el ámbito del Foro Social Urbano, la gravísima situación de los sin techo y la desigualdad social de la población de bajos ingresos mundial fue analizada por las organizaciones de los habitantes de África del Sur, Argentina, Bangladesh, Brasil, Gana, Haití, Italia, México, Nigeria, Perú, República Dominicana, Rusia, Senegal, Uganda, Venezuela, Zimbawe y las redes AIH, Jubileo Sur, HIC y CCS.

La Carta de Río destaca “que en todas las ciudades y en el campo se enfrenta una crisis estructural, derivada de la implementación de políticas urbanas subordinadas al capital transnacional, que se expresa en una infinidad de problemas: la pérdida de la función social de las ciudades; la mercantilización de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales; la profundización de las desigualdades sociales, económicas y de género; la anulación de la participación de la sociedad y la ausencia de democracia en la toma de decisiones de interés público; el aumento de la criminalidad, a pesar del aumento de la violencia policial y militar; el aumento exponencial de los desalojos forzados como un pilar del urbanismo capitalista; la criminalización de los movimientos sociales y la marginalización de las buenas prácticas de construcción social del hábitat; la degradación ambiental, llevando a los pobres a vivir en áreas de riesgo; el abandono de los gobiernos en establecer marcos regulatorios en la defensa del derecho a vivienda establecida a nivel nacional e internacional; la ineficacia de la ONU - Hábitat, ocupada en fortalecer su burocracia, abriendo espacio para el capital especulativo responsable por la burbuja inmobiliaria. Según la ONU, más de la mitad de la humanidad vive hoy en ciudades”.

En el mismo período en el Foro Urbano Mundial de las Naciones Unidades se dio un gran paso para que el Derecho a la Ciudad fuera reconocido internacionalmente como un derecho humano emergente, con la Carta de Río de Janeiro que considera este derecho como un nuevo paradigma político, cultural, económico y socioambiental para la construcción de ciudades justas, democráticas y sustentables

En los términos de la Carta de Río del Foro Urbano Mundial de las Naciones Unidas o Derecho a la Ciudad debe ser comprendido como un derecho colectivo de las presentes y futuras generaciones a una ciudad sustentable sin discriminación de género, edad, raza, condiciones de salud, renta, nacionalidad, etnia, condición migratoria, orientación política, religiosa o sexual, así como de preservar su memoria e identidad cultural.

En Brasil la situación es crítica, él déficit habitacional sobrepasa la marca de los 7 (siete) millones de unidades habitacionales y 10 (diez) millones de personas viven en áreas degradadas según datos Ministerio de las Ciudades, a pesar de los avances en la política habitacional.

Se destaca el gran número de desalojos, donde las familias pierden de forma abrupta y violenta su casa, o su hábitat siendo los mismos lanzados a la calle y/o reubicados en lugares sin ninguna infraestructura y distantes de los centros. Dentro de este contexto destacamos la política de reestructuración urbana en implantación en las grandes ciudades brasileñas, donde los sin techo, la población de calle – familias de bajos ingresos – son colocadas fuera de radio urbano, perdiendo su identidad social, cultural y económica, pues la gran mayoría trabaja en la economía informal. La construcción de grandes obras como nudos viales, empresas hidroeléctricas, puertos fluviales y marítimos, estadios de fútbol, especulación inmobiliaria y la verticalización de las ciudades han sido a lo largo de los tiempos los responsables por el aumento de los desalojos en el País

El derecho a la vivienda, reconocido por la Constitución del Brasil y en Tratados Internacionales de Derechos Humanos de los cuales Brasil es signatario, a pesar de los avances en el último período, aún no es respetado por el Estado, la tierra (urbana y rural) y las ciudades no cumplen su función social.

Para transformar esta realidad, debemos cada vez más potencializar la plataforma del derecho a ciudad con las organizaciones internacionales, nacionales y locales, sociedad en general, para la implementación y monitoreo de políticas de desarrollo urbano que aseguren el acceso al suelo, viviendas adecuadas, movilidad, infraestructura, equipamientos sociales y a los mecanismos y las fuentes de recursos suficientes y sustentables.

El Comité Brasil, compuesto por las entidades que firman esta carta se comprometen:

• Divulgar y discutir en el ámbito nacional la función social de la propiedad y el derecho a la ciudad.
• Divulgar y distribuir en todo el territorio nacional la carta de la Asamblea Mundial de los Habitantes.
• Ayudar a construir una plataforma unitaria para ser presentada en la Asamblea Mundial de los Habitantes (AMH), como también viabilizar nuestra participación en Dakar 2011.

• Interactuar con los países que están construyendo esta propuesta.

ENTIDADES:

CONAM, FACESP, MDM, UNMP, MNLM, CMP, INSTITUTO POLIS, FASE, BENTO RUBIÃO, MDT, TIERRA DE DERECHO, FOROS REGIONALES; DE LA AMAZONÍA LEGAL, NORDESTE.

21 de agosto 2010

Bartiria Lima da Costa, Presidente de la CONAM

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